jueves, 25 de septiembre de 2008

"Ahora que casi no comía..."


Seguro que ya habéis oído esta historia. No sé su origen, pero os la cuento aquí en adaptación libre:
Un agricultor tenía un burro para realizar las labores del campo. El burro se comía todos los días su buen morral de alfalfa.
En un intento por aumentar la eficiencia del burro, el agricultor pensó en reducir un poco la cantidad de alfalfa que ponía en el morral, de forma que el animal casi no lo notase, y se fuese acostumbrando.
Así lo hizo, y efectivamente, el animal no se quejó, y siguió realizando su trabajo habitual.
El agricultor quiso seguir aumentando la eficiencia del burro, así que decidió repetir el procedimiento. Y volvió a funcionar...
Y lo repitió nuevamente, y nuevamente funcionó...
Hasta que tras varias maniobras repetidas de ir reduciendo poco a poco la ración diaria de alimento, el burro apenas si consumía unas pocas briznas de alfalfa cada día. El agricultor estaba encantado.
Y entonces, para su sorpresa, el animal murió.
Y el agricultor exclamó:
"¡Vaya, ahora que casi la había acostumbrado a no comer!"

Esa sensación de burros es la que a veces tengo en mi trabajo: cada vez más trabajo, y menos mano de obra. Hasta que se muera el burro.

1 comentario:

  1. Esta es parecida

    http://godsea.adicto.org/archivo.php?tid=la-historia-de-los-remeros__501

    Y esta no es menos mala

    http://ugtcaixacatalunya.org/circulars/esp/20070419.htm

    Un saludo y animo!

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